La asociación económica con EE.UU. podría impulsar a Rusia a poner fin a la guerra, dice la Casa Blanca

Las asociaciones económicas con Estados Unidos podrían proporcionar a Rusia un incentivo para poner fin a la guerra a gran escala contra Ucrania, dijo la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, en una reunión informativa el 15 de abril.

Los comentarios de Leavitt se producen poco después de que el enviado especial del presidente estadounidense Donald Trump, Steve Witkoff, se reuniera personalmente con el presidente ruso Vladimir Putin en San Petersburgo el 11 de abril.

La conversación con Putin fue "productiva", dijo Leavitt a los periodistas.

«[Witkoff] cree que Rusia quiere poner fin a esta guerra y el presidente también lo cree», afirmó.

Rusia tiene un incentivo para poner fin a esta guerra, y quizás ese incentivo podría ser la colaboración económica con Estados Unidos. Pero primero necesitamos un alto el fuego, y el presidente y el enviado presidencial, Witkoff, se lo dejaron muy claro a los rusos.
Leavitt no especificó ningún acuerdo económico actual o potencial entre Washington y Moscú en sus comentarios, diciendo que no quería adelantarse a las negociaciones oficiales.

El día anterior, Witkoff declaró a 'Fox News' que sus conversaciones con Putin se centraron en un posible acuerdo de paz basado en el estatus de "cinco territorios": Crimea, supuestamente ocupada por Rusia, y las regiones parcialmente ocupadas de Donetsk, Luhansk, Zaporiyia y Jersón. Witkoff también insinuó incentivos económicos para Estados Unidos y Rusia.

«Veo la posibilidad de reestructurar la relación entre Rusia y Estados Unidos mediante oportunidades comerciales muy atractivas», afirmó. «Eso también aporta una verdadera estabilidad a la región».

Desde que Trump asumió el cargo en enero, Washington ha tomado medidas para normalizar las relaciones con Moscú, con énfasis en los lazos económicos. Tras una llamada telefónica entre Trump y Putin el 18 de marzo, el Kremlin afirmó que los líderes estaban interesados en desarrollar una cooperación mutuamente beneficiosa en diversos sectores. Posteriormente, la Casa Blanca destacó el potencial de importantes acuerdos económicos entre ambos países.

La administración Trump también busca un acuerdo sobre minerales con Kiev que otorgaría a Estados Unidos un amplio control sobre los ingresos provenientes de los recursos naturales de Ucrania. Estados Unidos afirma que el acuerdo ayudaría a proteger a Ucrania de la agresión rusa, aunque no incluye garantías de seguridad.

Mientras la administración Trump insiste en que el Kremlin está listo para la paz, Rusia continúa lanzando ataques letales contra centros civiles de Ucrania. Rusia atacó la ciudad nororiental de Sumy con misiles balísticos la mañana del Domingo de Ramos, matando a 35 personas e hiriendo a 117.

Rusia también se niega a aceptar el llamado de Washington a un alto el fuego total de 30 días, una propuesta que Kiev ya ha respaldado. Una tregua parcial que abarca la infraestructura energética ha sido violada repetidamente por las fuerzas rusas.