Esta jornada de sábado 17 de mayo las fuerzas rusas anunciaron la "liberación" de Alexandrópol, mientras reportaron la neutralización de más de 1,300 soldados ucranianos en las últimas 24 horas. Estos movimientos refuerzan la presión sobre las posiciones ucranianas en la región, especialmente en la cercana localidad de Konstantínovka.
El ministerio de Defensa ruso detalló que las mayores pérdidas enemigas ocurrieron en el grupo Centro, con casi 500 bajas, seguidas por el grupo Sur y otros frentes. Además, las tropas rusas destruyeron tanques, vehículos blindados y piezas de artillería, y atacaron depósitos de municiones y bases temporales ucranianas en más de 140 zonas distintas.
La defensa antiaérea rusa también interceptó bombas guiadas, misiles 'Himars' y derribó decenas de drones ucranianos, lo que evidencia la intensidad del combate en el terreno y la importancia que Moscú otorga a mantener el control aéreo y electrónico en la zona.
La toma de Alexandrópol abre un nuevo frente para aumentar la presión sobre Konstantínovka, un punto clave para la ofensiva rusa en Donetsk. Según fuentes rusas, esta victoria permitirá avanzar con mayor rapidez y fuerza, consolidando posiciones y debilitando la resistencia ucraniana.
Cabe recordar que las primeras conversaciones directas entre Rusia y Ucrania desde marzo de 2022 se llevaron a cabo en Estambul el pasado 16 de mayo. Como resultado, acordaron un intercambio masivo de prisioneros, y Ucrania solicitó una reunión entre los jefes de Estado de ambos países, de lo cual Moscú tomó nota.
Comentarios
Publicar un comentario