Más de medio millón de personas se han visto obligadas en las últimas horas a huir de sus hogares en la provincia de Punjab, al este de Pakistán, debido a las inundaciones y al aumento del caudal de los ríos a niveles muy peligrosos.
El comisionado de ayuda para esa región, Nabeel Javed, informó que entre las zonas más afectadas están el distrito de Muzaffargarh y Multan, donde se encuentran entre las aguas más de 3,900 aldeas por el desbordamiento incontrolado hace un par de semanas de los ríos Ravi, Sutlej y Chenab.
Según el funcionario, las evacuaciones masivas continúan, totalizando hasta ahora 1.8 millones desde el mes pasado. El gobierno ha instalado cientos de tiendas de campaña para los desplazados en Muzaffargarh, Narowal y Kasur.
El director general de la Autoridad de Gestión de Desastres provincial, Irfan Ali Kathia, apuntó que miles de funcionarios están participando en las labores de rescate.
«Los suministros para los desplazados están en camino y una de las operaciones de rescate y socorro más grandes aún está en marcha», especificó Kathia, quien agregó que han abierto algunas brechas en el dique del río Chenab.
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