
Afganistán lanza ataques aéreos contra Pakistán, en un momento de alta tensión entre los dos países.
El Ministerio de Defensa afgano indicó este sábado 28 de diciembre que sus fuerzas atacaron "varios puntos" dentro del territorio paquistaní en represalia por los mortíferos asaltos aéreos de la semana pasada.
El pasado martes 24 de diciembre, Pakistán lanzó una operación para destruir un centro de entrenamiento y matar a los insurgentes en la provincia oriental de Paktika, en Afganistán. Los ataques mataron al menos 46 personas, en su mayoría mujeres y niños.
Las declaraciones del Ministerio de Defensa talibán publicadas este sábado en 'X' subrayaron que sus fuerzas atacaron puntos paquistaníes que «servían como centros y escondites para elementos maliciosos y sus partidarios que organizaban y coordinaban ataques en Afganistán».
No obstante, el portavoz del ministerio afgano, Enayatullah Khowarazmi, entregó informaciones ambiguas sobre las zonas que fueron atacadas. «No consideramos que sea territorio de Pakistán, por lo tanto, no podemos confirmar el territorio, pero estaba al otro lado de la hipotética línea», afirmó en referencia a la expresión utilizada por las autoridades afganas para referirse a una zona fronteriza en disputa.
Afganistán ha rechazado durante décadas la frontera, conocida como la 'Línea Durand', trazada por las autoridades coloniales británicas en el siglo XIX a través del cinturón tribal montañoso y a menudo anárquico entre lo que ahora es Afganistán y Pakistán.
El Ministerio de Defensa afgano tampoco precisó cuándo tuvieron lugar los ataques ni si hubo víctimas. Sin embargo, 'Hurriyet Daily News', un medio de comunicación pro-talibán, que citó fuentes oficiales indicó que los asaltos mataron a 19 soldados paquistaníes y tres civiles afganos.
Hasta el momento, ningún miembro del Ministerio de Asuntos Exteriores de Pakistán se ha pronunciado al respecto.
La prensa local también indicó que las embestidas tuvieron lugar a última hora de la noche del viernes 27 de diciembre, desde las provincias fronterizas de Khost y Paktika, en el sureste del país.
Asimismo, medios de comunicación afganos reportaron que el ataque incluyó el uso de armas pesadas.
«Eran las 21h15m de la noche cuando aparecieron los primeros drones, seguidos de los aviones a reacción en la zona. Los drones identificaron los objetivos y luego los aviones a reacción comenzaron a bombardear las casas». Es el relato de uno de los residentes que vivió el ataque, mientras muestras a las cámaras los restos de las municiones.
El pasado 24 de diciembre, Pakistán lanzó sobre el este de Afganistán ataques aéreos que causaron la muerte de 46 personas, en su mayoría mujeres y niños, según informó el gobierno talibán.
Hamdullah Fitrat, portavoz adjunto de los talibanes, aseguró que también resultaron heridas seis personas en la provincia de Paktika, fronteriza con Pakistán.
El funcionario agregó que la mayoría de las víctimas eran refugiados de la región de Waziristán. El bombardeo tuvo como objetivo varios campamentos del Tehreek-e-Taliban Pakistan (TTP), o talibanes paquistaníes, en la provincia afgana de Paktika, y destruyó por completo uno de ellos, informó a EFE un funcionario de seguridad paquistaní, bajo condición de anonimato.
«No estaba en casa esa noche. Perdí a 15 miembros de mi familia en esta casa: mi padre, un hermano, tres sobrinos, dos sobrinas, la esposa de mi hermano, mi madre y dos hermanas. Todos se fueron», afirmó otra residente tras el ataque.
Ese ataque ocurrió horas después de que el representante especial de Pakistán para Afganistán, Mohammad Sadiq, se reuniera con el ministro de Asuntos Exteriores del gobierno de facto de los talibanes en Afganistán, Amir Khan Muttaqi, el ministro del Interior, Sirajuddin Haqqani, y otros altos funcionarios en Kabul.
Pero ese no fue el único asalto que ha realizado Pakistán sobre Afganistán. El pasado marzo, se registraron dos ataques aéreos, en las provincias fronterizas de Khost y Paktika.
Las tensiones fronterizas entre los dos países han aumentado desde que el gobierno talibán tomó el poder en 2021 en Kabul.
Islamabad acusa a los talibanes de albergar en Afganistán a grupos insurgentes para perpetrar ataques en Pakistán, acusaciones que los fundamentalistas han negado en numerosas ocasiones.
El Ejército paquistaní informó el viernes 27 de diciembre que alrededor de 1,000 insurgentes han muerto en lo corrido de este año en operaciones contra la insurgencia en Pakistán, la cifra más alta registrada en los últimos cinco años.
De su lado también han muerto 383 de sus soldados en dichas misiones.
«Se han llevado con éxito, en 2024, un total de 59,775 operaciones basadas en inteligencia contra terroristas y sus colaboradores», aseguró el director general de la oficina de medios del Ejército, Ahmed Sharif.
Sus declaraciones suponen más de 160 operaciones al día para atajar el repunte de violencia armada que experimenta el país en los últimos años.
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